De vez en cuando...sólo de vez en cuando me encuentro en una situación bajo presión, mucha presión. Ya me ha pasado más veces, y hasta la fecha (toquemos madera) he conseguido salir airoso.
En honor a la verdad es que siempre ha habido más de una persona ayudándome a salir de esa en la que me he metido.
Aún siguen apareciendo esos momentos...pero me atrevo a escribir que ha cambiado algo sustancial y que me afecta muchísimo (para bien): ¡Ya no siento miedo cuando se presentan!, ni cuando se desarrollan y, además, no tengo miedo cuando se van y amenazan con volver jjj..
Uff, qué descanso. No me preguntes la fórmula...ni idea. Peeero la verdad es que sospecho que se trata de una elección entre dos posibilidades: o huir en dirección contraria al reto que se me presenta o mirar el reto de frente respirando y confiar. Esta última me transmite emociones positivas.
